Todos hemos experimentado o conocemos a alguien que ha experimentado un relación que no llega a formalizarse
Para superar algo así, primero tenemos que normalizar que puede ser incluso más doloroso que la ruptura de un noviazgo.
Duele porque como no hay una ruptura como tal, nunca hay un proceso de duelo.
Porque un “casi algo” produce mucha confusión y emociones intensas.
Porque se invierte mucho tiempo y energía en un vínculo que no se da.
Duele sobre todo porque te creaste una idea de la relación y de lo bueno que podría ser, pero nunca se formalizó.
Te quedas solamente con las expectativas y pensando en qué hubiera sido.
Para poder superar un “casi algo”, debemos aceptar algunas cosas:
Tal vez no te haga sentido tener que decir adiós, pero mientras más rápido aceptes la situación como es, más rápido sanarás.
Cerrar el ciclo tal vez no se podrá hacer con la otra persona y hay que aceptar que lo tendremos que hacer por nuestra cuenta.
Dejar ir no significa dejar de querer, a veces tenemos que tomar otro camino aunque el corazón nos pida seguir.
Un “casi algo” duele tanto porque cuestionamos nuestro valor y toca nuestra herida de no sentirnos suficientes.
Un “casi algo” es difícil de olvidar ya que nos aferramos a lograr estar con esa persona porque de manera inconsciente buscamos volvernos a sentirnos suficientes.
La situación crea una fórmula imaginaria en nuestro subconsciente:
Si no me quiere = no soy suficiente
Si estamos juntos = soy suficiente.
Para superar o sanar un “casi algo” tenemos que soltar las expectativas y la idealización de la persona y de la relación.
Tenemos que entender que si no se formaliza una relación, no tiene nada que ver con nuestro valor como persona.
Tal vez en en realidad no hay compatibilidad o la otra persona no está lista para el tipo de amor que damos.
¿Quieres una herramienta para encontrar una persona que realmente es compatible contigo?
Esta baraja y este juego de preguntas son para ti: Baraja y juego conexión.